Fernando Jácome y Antonia Quinteros brillan en el Triatlón Internacional de Viña del Mar. Más de 200 atletas compitieron en una jornada marcada por el buen clima y el apoyo masivo del público.
Dominio nacional en la categoría olímpica
El chileno Fernando Jácome, de 22 años, se consagró este domingo como el gran ganador del 28º Triatlón Internacional de Viña del Mar, al imponerse en la exigente distancia olímpica (1,5 km de natación, 40 km de ciclismo y 10 km de trote) con un tiempo de 1 hora, 58 minutos y 30 segundos. La competencia, que tuvo lugar en la Ciudad Jardín, reunió a 200 triatletas de todo Chile y una nutrida delegación argentina.
Representante de la Pro Endurance Academy (PEAC), Jácome destacó desde la etapa de natación y amplió su ventaja durante el ciclismo y el trote. Superó ampliamente a sus compatriotas Benjamín Moya (2:05:19) y Sebastián Urra (2:06:15), quienes completaron el podio masculino.
«Me sentí genial y súper cómodo en las tres disciplinas, lo que me permitió marcar buena distancia con el resto. Acá se hacen los mejores eventos de Chile, por las exigencias del circuito, la preocupación por los atletas, el clima y la comunidad, que siempre se motiva mucho apoyando en toda la ruta», señaló el campeón, quien venía de un podio en la Copa Continental de Iquique y ahora se enfocará en el Panamericano de Triatlón Elite, programado para el 7 y 8 de junio en Calima, Colombia.
Antonia Quinteros: Un triunfo clave en su transición a la élite
En la competencia femenina, la joven Antonia Quinteros (20), del club Triatlón UC, logró su victoria más significativa desde su paso de la categoría juvenil al alto rendimiento. Con un tiempo de 2 horas, 23 minutos y 20 segundos, se impuso con autoridad ante Eva Peña (2:31:14) y Alina Codjambassis (2:46:27), quienes completaron el podio.
Jóvenes talentos se lucen en la distancia Sprint
En la distancia Sprint (750 m de natación, 20 km de ciclismo y 5 km de trote), los vencedores del Campeonato Nacional fueron Mateo Silva e Ignacia Balboa. En tanto, entre los talentos emergentes de 14 a 15 años destacaron José Tomás Valli y Florencia Peña, consolidando una prometedora cantera para el futuro del triatlón chileno.
Un circuito emblemático y un evento con apoyo institucional
El circuito comenzó en Playa El Sol y se extendió por Avenida San Martín y La Marina, hasta el icónico Reloj de Flores, incluyendo además el Cerro Castillo para quienes compitieron en la distancia Olímpica. El evento contó con el respaldo de la Ilustre Municipalidad de Viña del Mar, su Concejo Municipal, la Delegación Presidencial, la Seremi del Deporte, el Gobierno Regional, el Ministerio del Deporte, el Instituto Nacional de Deportes (IND), Carabineros, la Armada de Chile y la Federación Chilena de Triatlón (Fechitri).
Viña del Mar se proyecta como sede internacional
Este tradicional triatlón sirvió también como antesala de la tercera Copa del Mundo de Triatlón, que se disputará el 1 y 2 de noviembre en la misma ciudad. A largo plazo, Viña del Mar se perfila como sede permanente del triatlón chileno, especialmente en el contexto de una eventual postulación de Chile a los Juegos Olímpicos de 2036.
«Fue una jornada espectacular, tanto por la calidad del espectáculo, la seguridad para los triatletas, el clima y la confirmación de Viña del Mar como un lugar privilegiado en el circuito mundial. El 2025 será nuevamente el año del triatlón y todos estamos comprometidos con seguir haciendo historia», destacó Andrés Droguett, presidente del Club Triatletas Viña del Mar y organizador del evento.