Hiromu Inada completó un IRONMAN 70.3 a los 92 años. La leyenda viviente completó un IRONMAN 70.3 en Australia y sigue inspirando con su rutina, disciplina y pasión por el deporte.
Una hazaña histórica en Cairns
A sus 92 años, Hiromu Inada volvió a escribir su nombre en la historia del triatlón. El atleta japonés completó el pasado fin de semana un IRONMAN 70.3 en la ciudad de Cairns, Australia, marcando un tiempo de 10 horas, 11 minutos y 23 segundos. Aunque su tiempo quedó fuera de la clasificación oficial, logró terminar la prueba gracias a que la organización mantuvo el circuito abierto tanto para los participantes del medio IRONMAN como del IRONMAN completo.
El recorrido incluyó 1,9 km de natación, 90 km de ciclismo y 21,1 km de carrera a pie, un esfuerzo descomunal que reafirma a Inada como un símbolo de perseverancia y superación.
Un camino tardío pero imparable
Inada no siempre fue un deportista. Durante décadas fue periodista y no aprendió a nadar sino hasta los 60 años, cuando decidió ponerse en forma. Su debut en el triatlón llegó a los 70, y desde entonces no ha parado. En 2018, con 85 años y 328 días, se convirtió en la persona de mayor edad en completar un IRONMAN completo en Hawái, prueba que incluye 3,8 km de natación, 180 km en bicicleta y un maratón completo (42,2 km).
No se detuvo allí. En 2021, con 88 años, se proclamó campeón del mundo de su categoría en el mismo evento, completando una gesta que lo catapultó como referente mundial en longevidad deportiva.
Disciplina y motivación: El secreto de su vitalidad
Su rutina es digna de admiración. Vive en la ciudad de Chiba, cerca de Tokio, y se levanta todos los días a las 4:30 de la mañana. Entrena seis veces por semana, con sesiones que combinan natación en la piscina de una escuela internacional, carreras de 3.000 metros, ciclismo y hasta patinaje.
«Aunque tengo el mismo plan de entrenamiento que los jóvenes, tardo el doble de tiempo en hacerlo. Pero verlos me motiva. Creo que es bueno cómo nos inspiramos mutuamente», confesó Inada, quien también destacó la importancia de una buena alimentación para compensar el desgaste físico a su edad: «Mis huesos son más delgados y mis músculos están más débiles, por eso necesito una nutrición adecuada».
Una inspiración para toda la comunidad del triatlón
Las reacciones tras su participación en Cairns no se hicieron esperar. Su compañero de entrenamientos, Satoshi Namekata, expresó: «Es una leyenda. Todo el mundo quiere ser como él. Nos motiva a todos cuando aparece en los entrenamientos a su edad«.
Lejos de buscar récords o medallas, Inada se mueve por algo más profundo: la pasión por seguir descubriendo y creciendo. Como él mismo señaló en una entrevista reciente: «A esta edad todavía hago descubrimientos. Grito de alegría cuando soy feliz. Hacer lo que realmente deseas te alegra la vida, incluso después de jubilarte o cuando ya estás mayor«.
Un legado que trasciende el deporte
La historia de Hiromu Inada no solo habla de resistencia física, sino también de una actitud ante la vida. Con cada brazada, pedaleo y zancada, demuestra que nunca es tarde para empezar, que la constancia vence al tiempo, y que el verdadero límite está en la mente.
Su figura se ha convertido en un faro para deportistas de todas las edades. Más allá de sus logros, Inada representa un mensaje claro y poderoso: la edad no es una barrera cuando el corazón sigue queriendo avanzar.
Ver esta publicación en Instagram